Los auriculares, usados mucho tiempo, pueden provocar que aumenten la humedad y la temperatura en el canal auditivo y favorecer la aparición de hongos.
Un niño de 10 años se llevó una sorpresa bastante desagradable relacionada al uso por tiempo prolongado que él mismo hacía de sus auriculares . El menor sentía picazón y molestias dentro de sus oídos y cuando fue al médico descubrieron que tenía en el canal auditivo «un bosque de hongos negros» .
Este particular hallazgo se produjo en Beijing, China, a principios de este mes cuando la madre de este pequeño, preocupada por sus constantes quejas sobre la picazón de su oído, decidió llevarlo al médico. Concurrió entonces al Hospital de Salud Materno Infantil del Distrito de Shunyi, donde los profesionales descubrieron la verdad, de acuerdo con la cadena australiana 7News.
Allí, los especialistas miraron dentro de su canal auditivo y fue donde notaron, en el oído interno, que habían crecido numerosos «hongos negros». «Un bosque de ellos», señalaron, como para graficar la situación.
El especialista en oídos, nariz y garganta, Wu Yuhua diagnosticó que el niño tenía micosis en su oído, un término médico para definir una infección por hongos. El doctor cree que eso se debe a que el chico utilizaba auriculares por tiempo prolongado, y que eso impide que el canal se oxigene.
«Cuando se ponen los auriculares en el oído, no solo evitan que la cera se caiga naturalmente del oído, sino que también pueden retener la humedad y aumentar la temperatura dentro del canal. Es un caldo de cultivo perfecto para que crezcan estos organismos«, señaló el médico.
El niño recibió un tratamiento con un medicamento antifúngico y se recuperó por completo, pero seguramente a partir de ahora va a regular un poco mejor el tiempo de uso de los auriculares.